El Poder de las Matemáticas

Cuando los niños entran a la escuela se asustan con presagios funestos sobre los profesores de matemáticas, y muy probablemente se  imaginan a aquel personaje como un ogro que  pretende amargarles su  paso por la escuela. ¿Estará bien que en las escuelas existan tales tipos de personas que quieran hacerles daño a los pequeños? O tal vez todas estas historias sobre la enseñanza  trágica de las matemáticas, sólo sean remilgos de una sociedad que escuda su pereza mental,  en la dureza que implica asimilar un lenguaje de modelamiento simbólico.

 En algunos países orientales, la enseñanza de las matemáticas abarca casi el 50% del currículo de una escuela cualquiera, y su rigurosidad se amplia en estancias mayores de acuerdo al perfil del estudiante. La cultura oriental le da gran importancia a la enseñanza de esta  ciencia, y es básicamente por la necesidad de mantenerse en la cima de la producción mundial, sin querer decir que se hace énfasis sobre los individuos, sólo en asuntos económicos.

En la naturaleza hay muchos fenómenos que no los podemos sentir y sin embargo son vitales para el desempeño de los eventos del universo. La mayoría de estos comportamientos obedecen a reglas tan simples, como, la Conservación de la Energía. Como  el hombre no puede sensar estos comportamientos, es necesario desarrollar elementos que transformen  estos comportamientos a variables que los seres  humanos si puedan sensar. No obstante lo anterior implica que el hombre debe saber lo que no puede sentir, y el dilema se agranda cuando no se puede saber qué genera lo que el hombre puede sensar…. ¿Por qué suena?, ¿Por qué brilla?, etc. En este punto son  ineludibles los conceptos de un lenguaje como las matemáticas, para poder avanzar en la comprensión de estos fenómenos. Las matemáticas permiten descubrir el funcionamiento de la naturaleza, mediante el planteamiento de modelos simplificados que ilustran casos sencillos, y dan una idea del proceso, que no se puede  entender por simple muestreo de los sentidos.

Los sentidos de los seres vivos  han evolucionado, para garantizar la supervivencia de los  mismos, más que para entender el funcionamiento de la naturaleza, y es lógico, dado la cantidad  y diversidad de señales que se generan en el universo, producto de la  interacción de diferentes fuerzas (mecánicas, químicas, electromagnéticas, nucleares). Los sentidos de los seres humanos solo captan pequeños fragmentos del espectro de las señales que rondan el universo, no obstante esto permite realizar procesamiento eficiente (raciocinio)  de estas señales y realizar acciones con un buen  grado de inteligencia.

Modelar la naturaleza en su totalidad es algo muy complejo, y por el momento imposible, pues hay muchos sistemas irregulares, que dificultan la adaptación de modelos simbólicos a su proceder original. Por otro lado hay modelos que por el momento no se pueden resolver de manera unificada por métodos analíticos, sin embargo, no hay que dejar de probar suposiciones, pues en varios casos han arrojado conclusiones muy asombrosas, permitiendo a la humanidad avanzar en muchos aspectos tecnológicos.

El grado de complejidad de un evento esta relacionado con el esfuerzo que se tenga que hacer para poderlo apreciar, pero no todo en la naturaleza es tan complicado como parece, lo que complica su entendimiento es la forma o el método en que  se capta, puesto que muchas señales de la naturaleza son simples si se  analizan en su dominio original, como por el ejemplo el sonido, si lo analizamos en el tiempo puede parecer algo aleatorio y difuso, sin embargo, cuando se ve en el  dominio de la frecuencia , el sonido se vuelve una señal muy clara y puntual. En el planteamiento de modelos matemáticos  lo difícil no esta en adaptar las observaciones en el dominio que podemos medir          sino  encontrar el dominio original de los fenómenos, y desarrollar modelos que permitan pasar de un dominio a otro. Varios  problemas no se han resuelto, en gran razón por desconocer la transformación adecuada que permite relacionar el contexto en que se observa con el ambiente que los origina.

Muchos científicos, han contribuido considerablemente al desarrollo de la tecnología, a través de teorías promovidas por la imaginación, estructuradas bajo esquemas lógicos, y comprobadas por  experimentación. Los resultados de estas personas dependen en gran medida a la lógica del raciocinio que emplean en sus trabajos, pues esto le permite liberar su imaginación sobre terrenos cercados  por los modelos razonables, sin importar la lógica natural de los resultados, sino la sustentación practica de los mismos. Por ejemplo, gracias a modelos matemáticos como la ecuación de Onda, MAXWEL[1] pudo deducir que los campos electromagnéticos  se propagan a través del espacio, dando origen a la rama de las telecomunicaciones, y a toda una serie de inventos, como la televisión, la radio, los celulares, entre otros, que han transformado radicalmente la forma de vida de la sociedad.

Las matemáticas van mas allá de ser un enredo de números y letras para hacer cuentas. La matemática es un lenguaje de modelamiento natural puesto que permiten identificar fenómenos que el hombre no puede percibir con sus sentidos, además, que ofrecen un terreno fértil para el  libre albedrío de la imaginación, y resplandor  para la creatividad. Por razones como estas son obligatorias en cualquier carrera que implique labores creativas, pues para crear cosas útiles, es bueno imaginar sobre fundamentos lógicos, para poder proyectar configuraciones  fácticas.

Por más que el futuro sea incierto, muchas cosas en el universo siempre cumplen la misma rutina, y esto permite que el comportamiento de  un sistema a futuro pueda se predecido mediante simulaciones o teorías. El hecho de que se pueda pronosticar el funcionamiento de un elemento, es un  aspecto bastante importante en la sociedad  actual, puesto que los entes económicos e industriales pueden realizar sus procesos de manera eficiente e incrementando la calidad de vida de la humanidad.

El hombre no se puede negar a entender el lenguaje matemático, pues al parecer es una forma sencilla, de comprender el desarrollo del universo, y muy probablemente, sea el camino que pueda llevar al hombre hacia una fase superior de evolución.



[1] James Clerk Maxwel, Fisico Ingles (1831-1879).

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